Una vez finalizado el primer trimestre del año, es buen momento para analizar los datos de matriculaciones publicados por las asociaciones sectoriales y que pueden encontrarse en este enlace.
Terminamos 2021 con ilusión y esperanza, confiando en que la pandemia empezara a quedar atrás y nos permitiese emprender el camino de la recuperación, a pesar de ser conscientes de las limitaciones debidas a la escasez de determinados componentes, principalmente semiconductores.
Desafortunadamente, los acontecimientos cambiaron de rumbo y las tensiones internacionales pronto comenzaron a tensar los precios de la energía, hecho que se vio aún más agravado por la guerra de Ucrania. Esto llevó los carburantes a tal nivel de precio que muchos miembros de determinadas asociaciones de transportistas, entre ellos numerosas empresas de porta-vehículos, decidieron ponerse en huelga. Esto no hizo sino empeorar aún más las cosas, por el lado de la oferta.
La consecuencia de todo esto es que, con menos de 60.000 matriculaciones de turismos y una caída del 30% frente a marzo de 2021, el mes pasado ha sido el peor marzo en décadas, si exceptuamos los años de la pandemia. Aparte de 2020 y 2021, no se recordaba un mes de marzo con menos de 100.000 unidades y era frecuente incluso llegar a duplicar las cifras de este año.
Si analizamos las cifras del trimestre completo, vemos que la caída es cercana al 12% y esto nos hace temer que 2022 no será aún el año de la recuperación. Habrá que seguir esperando, a pesar de que fuentes sectoriales aseguran que el ritmo de generación de pedidos sigue siendo razonable. De momento, sigue siendo una crisis de oferta, no de demanda.
En cuanto a tendencias, dentro de un mercado en declive, se confirma una vez más la preferencia de los vehículos tipo SUV frente a los “tradicionales”, pues observamos que, pese a retroceder, los segmentos SUV pequeño (-1%) y SUV medio (-5%) se comportan mejor que Utilitarios (-22%) y Compactos (-18%), representando estos cuatro segmentos juntos más del 85% del mercado de turismos.
Por último, los datos por canales nos confirman lo que ya intuíamos: la caída se concentra en el canal de alquiladores (-64% en el trimestre), mientras que el canal de empresas retrocede levemente (-3% en el trimestre), siendo el de particulares el que, aunque con timidez, todavía logra “salvar los muebles” (+2% en el trimestre). No obstante, la caída de marzo (-22%) refleja un claro cambio de tendencia también en este canal.
En todo este contexto de crisis, los vehículos impulsados con energías alternativas son los únicos que siguen avanzando: terminaron 2021 representando un 35% del mercado y cierran este primer trimestre de 2022 alcanzando ya el 41% de las ventas y creciendo más del 24%.
Concretamente, los eléctricos puros crecen un 110%, los híbridos enchufables, un 46%, los de gas, un 18% y los híbridos no enchufables, un 14%. Lo “etiqueta 0” crecen un 67% y representan ya casi el 11% del mercado, mientras que los “etiqueta ECO” crecen un 14% y representan el 30% del total.
Estos datos demuestran que el sector del automóvil está atravesando un proceso de transformación disruptiva, avanzando hacia un nuevo modelo de movilidad descarbonizada, digital, conectada y sostenible, para el que es preciso prepararse y adaptarse con máxima prioridad.
En Auto Mobility contamos con amplio conocimiento y vasta experiencia en asesoramiento estratégico, “business intelligence”, digitalización de procesos y descarbonización, y nos comprometemos a ayudaros a abordar con éxito este nuevo reto.
Un saludo, F